Durante el año 2015 tendrán lugar dos conmemoraciones importantes en el mundo de las letras españolas: el V Centenario del Nacimiento de Santa Teresa de Ávila y el IV Centenario de la primera edición de la segunda parte del Ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha de Miguel de Cervantes Saavedra.
V Centenario del Nacimiento de Santa Teresa de Ávila
Teresa de Cepeda y Ahumada, más conocida como santa Teresa de Jesús o simplemente Teresa de Ávila, fue una religiosa, fundadora de las carmelitas descalzas, rama de la Orden de Nuestra Señora del Monte Carmelo, mística y escritora española.
Fecha de nacimiento: 28 de marzo de 1515, Gotarrendura, España
Fecha de la muerte: 4 de octubre de 1582, Alba de Tormes, España
Su nombre de familia fue Teresa de Ahumada. Santa Teresa era hija de Alonso Sánchez de Cepeda, de la ciudad de Toledo, y Beatriz de Ahumada, de la ciudad de Olmedo. Se instalaron en Ávila, donde nació Teresa el día 28 de marzo de 1515 en el seno de una familia numerosa: «éramos tres hermanas y nueve hermanos», recuerda ella en el Libro de la Vida.
Su familia tenía una gran afición a las letras y a la cultura, por lo que la Teresa aprende a leer y a escribir a edad muy temprana.
En la vida de Teresa se suceden tres grandes etapas:
Vive en la casa de sus padres hasta la edad de los 20 años; Teresa niña, adolescente y joven, asiste sucesivamente a la muerte de su madre, a la partida de varios de sus hermanos rumbo a las Indias, y al proceso de lenta disolución del hogar.
A los 20 años opta por la vida religiosa, muy a pesar de su padre. En su biografía asegura que huyó de su casa una mañana para entrar en el monasterio de carmelitas de la Encarnación. Allí vivirá 27 años, con una gran comunidad religiosa compuesta por cerca de 180 monjas, soportando y superando el trauma de una enfermedad grave, lo que marcará su físico para toda la vida y llevándola a adentrarse en la vida espiritual. En torno a sus 40 años, Teresa siente la llamada a lo que se ha denominado “experiencia mística” que no sólo cambia el rumbo de su vida, sino que la define y da espesor humano y cristiano a su persona.
A los 47 años, Teresa inicia una tercera etapa pues sale del convento de la Encarnación para fundar el Carmelo de San José y poco después emprende su tarea de fundadora andariega. Sus viajes son en carromato o a lomo de una mula hasta Medina y Valladolid, Alba de Tormes, Salamanca, Beas, Sevilla, Soria y Burgos, para descansar finalmente en su lecho de muerte en Alba de Tormes el 4 de octubre de 1582.
Obra literaria
Escritora de gran variedad de géneros y niveles comenzó deslumbrando a sus confesores que alimentaron su pluma. Teresa escribió mucho, pero ninguno de sus libros apareció publicado en vida de la santa. Se hicieron copias pero únicamente para el uso de las carmelitas. Ramón Menéndez Pidal destacó que por humildad, Teresa se esforzaba por escribir lo más sencillamente posible, escribía como hablaba, escribía deprisa y rara vez se releía.
El castillo, un mundo interior
Teresa de Jesús es una profunda conocedora del ser humano. En su obra cumbre, las Moradas, traza un magistral retrato de cómo es ese ser humano creado por Dios e invitado a la aventura de alcanzar su máxima plenitud.
Vamos a asomarnos a ese castillo suyo para entrever la grandeza y hermosura que esta mujer descubre en cada persona humana, y los retos a los que está llamada.
Para seguir leyendo más acerca de Santa Teresa y esta importante conmemoración visitar los siguientes enlaces:
Sitio Oficial del V Centenario del Nacimiento de Santa Teresa
Blog del monasterio de las Carmelitas Descalzas de Puçol (Valencia)
IV Centenario de la 2da Parte del Quijote de la Mancha
Edición escolar especial
La RAE publica con Santillana un «Quijote» popular y escolar
En el año de su tricentenario, y como preludio a las celebraciones del bienio de Cervantes —en 2015 se cumplen cuatro siglos de la aparición de la segunda parte del Quijote y en 2016 se conmemora el 400 aniversario del fallecimiento del autor—, la Real Academia Española rinde homenaje al Quijote académico de 1780, impreso por Joaquín Ibarra, con esta edición popular de El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha, adaptada para uso escolar por el académico Arturo Pérez-Reverte y publicada en Santillana. La obra incorpora prólogos del propio Pérez-Reverte y de Darío Villanueva, secretario de la RAE y coordinador del programa del III Centenario.
La adaptación de Pérez-Reverte descubre a los lectores la esencia, el corazón del clásico de la literatura universal. Con una impecable labor de revisión, esta nueva edición ofrece por vez primera una lectura lineal de la trama central del Quijote, respetando la integridad del texto, los episodios fundamentales, el tono y la estructura general de la obra. Esto ha sido posible gracias a una cuidadosa labor de poda de los episodios secundarios y las digresiones que hacían complejo el texto para su uso escolar.
«Hay numerosos Quijotes escolares que consisten en adaptaciones, antologías y reescrituras del texto cervantino. Algunos son muy recomendables, pero en su mayor parte no permiten una lectura rigurosa, limpia y sin obstáculos, de la trama básica que narra la peripecia del ingenioso hidalgo y su escudero. Y cuando se trata de trabajar en colegios con el texto íntegro, las digresiones y relatos insertos en él perturban a veces la aproximación amena, eficaz, que una herramienta educativa o una lectura sencilla pueden reclamar», escribe Pérez-Reverte en el prólogo de esta edición.
Para EFE Pérez Reverte dice "Meterme en el mecanismo de relojería del Quijote ha sido una experiencia personal inenarrable", subraya este novelista y académico, que ha respetado "al máximo" el texto de Cervantes, si bien, para facilitar su lectura, ha eliminado "todo aquello que no fuese estrictamente narrativo y que rompiera la línea argumental principal".
Respeta al máximo el texto de Cervantes
Pérez-Reverte ha "respetado al máximo el texto de Cervantes" y, para que fuese "comprensible para los jóvenes" y también para adultos no especializados, ha suprimido algunos fragmentos.
Como dice en el prólogo, "esa labor de poda, muy prudente y calculada, dedica especial atención a la limpieza de los puntos de sutura de los párrafos eliminados, para que la lectura de estos no se advierta en una lectura convencional".
Eso incluye "la renumeración y refundición de algunos capítulos que en su mayor parte conservan el título del episodio original al que pertenecen", añade el académico.
Ha cambiado algunas palabras del texto original cervantino para facilitar su comprensión, "pero las ha sustituido por otras de la misma época, no por términos modernos". Por ejemplo, cuando don Quijote habla de "armas jaldes", Pérez-Reverte lo sustituye por "armas gualdas" o amarillas.
"Siempre he tratado de que mi intervención fuese la mínima, únicamente la necesaria", asegura en la entrevista.